sábado, 6 de agosto de 2011

Que debe comer la mamá lactante?

La alimentación en una madre que durante toda su vida se ha alimentado bien, tiene poco efecto a menos que sea muy diferente durante el embarazo y la lactancia, gracias a las reservas que tendrá su cuerpo. No así, para una madre mal nutrida, que durante su embarazo la buena alimentación será crucial para un desarrollo saludable del mismo.

Hay estudios que recalcan que el estado nutricional de la madre es vital para que el bebé tenga mejor salud, los trabajos de parto sean más cortos y tenga menos complicaciones.

La desnutrición materna puede restringir el crecimiento sano del bebé reduciendo el número y tamaño de sus células, incluyendo las de su cerebro. Por lo tanto una madre embarazada debe incrementar su ingesta de alimentos en una forma adecuada.

Estas necesidades de incrementar su alimentación son aún mayores conforme el embarazo se acerca al término. Una mujer embarazada o lactante debe tener por lo menos tres comidas balanceadas y dos tentempiés al día. Para lograr una buena nutrición nos basaremos en la definición de los grupos de alimentos que a continuación se enlistan:

Carbohidratos

Son nuestra principal fuente de energía para todas las funciones del cuerpo y contracciones musculares (trabajo muscular). También ayudan a la regulación del metabolismo de las proteínas y las grasas.

Los carbohidratos simples, como el azúcar y la miel, pueden causar que el nivel de azúcar en sangre suba, para después caer rápidamente y enviar la señal al cuerpo de la necesidad de consumir más alimentos.

Cuando este tipo de alimento es consumido sin ser acompañado de otros, te pueden hacer sentir fatigada, nerviosa, mareada, ansiosa o con dolores de cabeza.

Son preferibles los carbohidratos complejos, ya que contienen vitaminas y minerales. Estos toman más tiempo en ser digeridos y no estimulan la necesidad de más alimento. Los carbohidratos complejos están en alimentos como cereales arroz y pan integral.

Grasas

Son la fuente de energía mas concentrada en la dieta, actúan como almacén de las vitaminas liposolubles (vitamina A, D, E y K). Las grasas prolongan el proceso de la digestión retardando el tiempo de vaciado del estómago, haciéndonos sentir satisfechas por más tiempo.

Las grasas saturadas se encuentran principalmente en alimentos provenientes de animales, como huevo, carne, mantequilla y leche. Las grasas no saturadas se encuentran en alimentos como vegetales, nueces y semillas. Una dieta saludable debe contener mucha más cantidad de grasas no saturadas que de grasas saturadas.

Proteínas

Muchas partes del cuerpo están hechas de proteínas como músculos, tejidos y hormonas. Son la principal fuente de material para formar nuestros órganos internos así como de los músculos, sangre, piel, cabello y uñas. Las proteínas se necesitan para la formación de hormonas que controlan el desarrollo sexual y la formación de la leche durante la lactancia.

Los alimentos se pueden combinar para formar alimentos completos. Un ejemplo: una mujer necesita entre 45 y 50 g de proteína diariamente, dependiendo de su peso y actividad; sin embargo, esa misma mujer necesita 60 grs. durante el embarazo y 66 grs. durante la lactancia.

Alimentos económicos que son buenas fuentes de proteínas: frijoles, hígado de res (no tan recomendable por ser el “filtro” del organismo del animal), huevos, pollo, leche entera, pavo, cacahuates, puerco, atún, carne de res, cualquier queso, garbanzo y lentejas. Si se combinan con vegetales forman un alimento más completo.

Vitaminas

Son indispensables para la regulación de las funciones diarias del cuerpo. Generalmente el cuerpo no las puede elaborar, de ahí la importancia de consumirlas.

Las vitaminas liposolubles A, D, E y K, son almacenadas en los tejidos grasos de nuestro cuerpo. Las vitaminas hidrosolubles son las B y la C, no se almacenan en el cuerpo y deben ingerirse diariamente.

El ácido fólico es especialmente importante en la madre embarazada, se puede obtener de vegetales de hojas verdes y granos enteros.

Alimentos con alto contenido de ácido fólico (mg) en 100 grs. de alimento

Hígado de pollo - 738 mg
Hígado de res - 248 mg
Berros - 200 mg
Lechuga Romana - 136 mg
Perejil - 183 mg
Espinacas - 140 mg
Almendras - 96 mg
Acelga - 90 mg
Quelite - 85 mg
Coliflor - 77 mg
Brócoli - 71 mg
Aguacate - 62 mg
Pan Integral - 39 mg

Durante la lactancia, es recomendable incrementar la ingesta de vitaminas hidrosolubles, ya que los niveles de éstas en la leche materna, pueden verse afectadas por la ingesta de la madre. Los productos elaborados con granos enteros contienen más vitamina E, B6, ácido fólico, fósforo, magnesio y zinc que los productos refinados.

Minerales

Estos mantienen los procesos psicológicos, fortalecen las estructuras del esqueleto, y dan vigor al corazón, cerebro, músculos y sistema nervioso. También son importantes para la producción de hormonas y ayudan a mantener el delicado balance de líquidos que es esencial para nuestro correcto funcionamiento mental y físico.

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sábado, 6 de agosto de 2011

Que debe comer la mamá lactante?

La alimentación en una madre que durante toda su vida se ha alimentado bien, tiene poco efecto a menos que sea muy diferente durante el embarazo y la lactancia, gracias a las reservas que tendrá su cuerpo. No así, para una madre mal nutrida, que durante su embarazo la buena alimentación será crucial para un desarrollo saludable del mismo.

Hay estudios que recalcan que el estado nutricional de la madre es vital para que el bebé tenga mejor salud, los trabajos de parto sean más cortos y tenga menos complicaciones.

La desnutrición materna puede restringir el crecimiento sano del bebé reduciendo el número y tamaño de sus células, incluyendo las de su cerebro. Por lo tanto una madre embarazada debe incrementar su ingesta de alimentos en una forma adecuada.

Estas necesidades de incrementar su alimentación son aún mayores conforme el embarazo se acerca al término. Una mujer embarazada o lactante debe tener por lo menos tres comidas balanceadas y dos tentempiés al día. Para lograr una buena nutrición nos basaremos en la definición de los grupos de alimentos que a continuación se enlistan:

Carbohidratos

Son nuestra principal fuente de energía para todas las funciones del cuerpo y contracciones musculares (trabajo muscular). También ayudan a la regulación del metabolismo de las proteínas y las grasas.

Los carbohidratos simples, como el azúcar y la miel, pueden causar que el nivel de azúcar en sangre suba, para después caer rápidamente y enviar la señal al cuerpo de la necesidad de consumir más alimentos.

Cuando este tipo de alimento es consumido sin ser acompañado de otros, te pueden hacer sentir fatigada, nerviosa, mareada, ansiosa o con dolores de cabeza.

Son preferibles los carbohidratos complejos, ya que contienen vitaminas y minerales. Estos toman más tiempo en ser digeridos y no estimulan la necesidad de más alimento. Los carbohidratos complejos están en alimentos como cereales arroz y pan integral.

Grasas

Son la fuente de energía mas concentrada en la dieta, actúan como almacén de las vitaminas liposolubles (vitamina A, D, E y K). Las grasas prolongan el proceso de la digestión retardando el tiempo de vaciado del estómago, haciéndonos sentir satisfechas por más tiempo.

Las grasas saturadas se encuentran principalmente en alimentos provenientes de animales, como huevo, carne, mantequilla y leche. Las grasas no saturadas se encuentran en alimentos como vegetales, nueces y semillas. Una dieta saludable debe contener mucha más cantidad de grasas no saturadas que de grasas saturadas.

Proteínas

Muchas partes del cuerpo están hechas de proteínas como músculos, tejidos y hormonas. Son la principal fuente de material para formar nuestros órganos internos así como de los músculos, sangre, piel, cabello y uñas. Las proteínas se necesitan para la formación de hormonas que controlan el desarrollo sexual y la formación de la leche durante la lactancia.

Los alimentos se pueden combinar para formar alimentos completos. Un ejemplo: una mujer necesita entre 45 y 50 g de proteína diariamente, dependiendo de su peso y actividad; sin embargo, esa misma mujer necesita 60 grs. durante el embarazo y 66 grs. durante la lactancia.

Alimentos económicos que son buenas fuentes de proteínas: frijoles, hígado de res (no tan recomendable por ser el “filtro” del organismo del animal), huevos, pollo, leche entera, pavo, cacahuates, puerco, atún, carne de res, cualquier queso, garbanzo y lentejas. Si se combinan con vegetales forman un alimento más completo.

Vitaminas

Son indispensables para la regulación de las funciones diarias del cuerpo. Generalmente el cuerpo no las puede elaborar, de ahí la importancia de consumirlas.

Las vitaminas liposolubles A, D, E y K, son almacenadas en los tejidos grasos de nuestro cuerpo. Las vitaminas hidrosolubles son las B y la C, no se almacenan en el cuerpo y deben ingerirse diariamente.

El ácido fólico es especialmente importante en la madre embarazada, se puede obtener de vegetales de hojas verdes y granos enteros.

Alimentos con alto contenido de ácido fólico (mg) en 100 grs. de alimento

Hígado de pollo - 738 mg
Hígado de res - 248 mg
Berros - 200 mg
Lechuga Romana - 136 mg
Perejil - 183 mg
Espinacas - 140 mg
Almendras - 96 mg
Acelga - 90 mg
Quelite - 85 mg
Coliflor - 77 mg
Brócoli - 71 mg
Aguacate - 62 mg
Pan Integral - 39 mg

Durante la lactancia, es recomendable incrementar la ingesta de vitaminas hidrosolubles, ya que los niveles de éstas en la leche materna, pueden verse afectadas por la ingesta de la madre. Los productos elaborados con granos enteros contienen más vitamina E, B6, ácido fólico, fósforo, magnesio y zinc que los productos refinados.

Minerales

Estos mantienen los procesos psicológicos, fortalecen las estructuras del esqueleto, y dan vigor al corazón, cerebro, músculos y sistema nervioso. También son importantes para la producción de hormonas y ayudan a mantener el delicado balance de líquidos que es esencial para nuestro correcto funcionamiento mental y físico.

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